Una de las bebidas que más éxito tiene actualmente es el gin tonic, un combinado clásico, que nunca pasa de moda y que ha sabido adaptarse a las innovaciones en el mundo de la coctelería. Pero, al tratarse de un combinado que se demanda tanto, cada persona lo sirve de forma diferente. Si deseas tomar un buen gintonic en Madrid, te ofrecemos algunos datos que te servirán para identificar si tu copa se ha preparado de la manera correcta para que puedas disfrutar al máximo de sus aromas y matices.
Algunas claves para identificar un buen gin tonic
1. En primer lugar, lo primero que nos atraerá de un buen combinado es su aspecto visual, y uno de los principales datos a tener en cuenta es la elección del vaso. Para poder apreciar un buen gin tonic, este ha de ser servido en un vaso de boca amplia o en una copa de balón con el fin de apreciar mejor todos los aromas de la bebida. El vaso de tubo no es el más adecuado en este caso.
2. Además, otro aspecto importante es la burbuja. Para que no se rompa, el buen bartender remueve el combinado con la cuchara, lentamente y de arriba a abajo, cuidando de mezclar bien los componentes, pero sin eliminar las burbujas.
3. Un buen gin tonic ha de estar frío, pero nunca aguado. Por ello, la elección del hielo es muy importante. Han de elegirse cubitos con buen tamaño. Si tu copa tiene cubitos grandes, se mantendrá fría y no se derretirá, no aguando tu cóctel.
4. La estrella de todo gin tonic es, sin lugar a dudas, la ginebra. Actualmente existe en el mercado una gran variedad de ginebras, la mayoría de ellas elaboradas con base de bayas de enebro y otras hierbas que marcan la diferencia. Su elección depende en gran parte de tus gustos personales. Un buen barman sabrá aconsejarte acerca de las mejores ginebras.
5. Otro gesto muy importante es el de enfriar el vaso antes de comenzar a añadir la ginebra. Para ello, el buen bartender introduce el hielo durante unos segundos para enfriar el vaso y retira el exceso de agua para no aguar la mezcla. Después, la ginebra se añade despacio (de 4 a 5 cl es la medida perfecta). Tras ello, se añaden los botánicos elegidos, que, mezclados con el alcohol, liberan sus aromas.
6. En cuanto a la elección del mixer (la tónica), dependerá mucho de los gustos de cada persona. Actualmente, puedes escoger tu preferida: desde las opciones más clásicas hasta las tónicas aromatizadas con distintos sabores y colores. ¡Hora de experimentar! Lo importante es que, a la hora de incorporarla a la mezcla, esté bien fría y se vierta sobre el alcohol despacio, sobre los hielos o con ayuda de una cuchara.
Después de añadir todos los componentes, el resultado es un gin tonic burbujeante y lleno de aromas, servido en un vaso bien frío y que conserva bien la temperatura. Si lo deseas, también puedes pedir que se añadan más botánicos como decoración, para dar más aroma y color a tu cóctel perfecto.
